Si los guardianes del franquismo logran inmovilizar al juez Garzón, no cabrá la menor duda de que el Caudillo sabía lo que decía cuando aseguró que tras su muerte, todo quedaría atado y bien atado.
Mimaki fue un creativo publicitario que abandonó el oficio para dedicarse a la vida contemplativa. En la actualidad se le podría catalogar como manipulador digital a tiempo completo, o rompepelotas disidente part-time. Considerado peligroso, va armado con un Mac G-5 del que no duda hacer uso indiscriminadamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario